Un año mas hemos celebrado la Fiesta del Cordero en la Casa Mogent de Llinás. Una vez aposentados en una de las mesas que nos tenian reservadas, la cubrimos con un espléndido mantel confeccionado por Manuela. El tradicional paseo por el bosque con la consiguiente recolección de flores para adornar la mesa, nos sirvió para hacer apetito. Un aperitivo regado con un buen Cava dio paso a la parte central de la comida, la carne a la brasa que este año ha sido gestionada, preparada y cocida por el grupo de matrimonios jóvenes. La verdad es que les ha quedado esquisita y abundante pues cuando todos estábamos ya saciados, todavía iban pasando por las mesas con más carne para repartir. Al final hemos tenido una Eucaristía presidida por Juan Antonio y amenizada con guitarras y percusión, muy participada por todos los presentes y con un protagonismo especial de los niños. Al final Bernardino nos ha repartido panecillos bendecidos de San Antonio.